Insisten algunos en que son el grupo que más digna y apasionadamente han acercado el pop de aquí al legado inmortal de Curtis Mayfield, Terry Callier y otros imponentes soulmen de Chicago, pero decir eso, a pesar de decir mucho, sería quedarse corto. Lo cierto es que los gijoneses han creado con sus discos varias piezas capitales del pop estatal, y su reconocimiento internacional es fiel reflejo de ello.
Su nuevo álbum y cuarto de la saga, "Cabrini Green" (Siesta, 2012), supone el encuentro con el auténtico Edwin Moses, el desconocido músico de Chicago al que llevan profesando una más que honda admiración desde 1997; y en él despachan algunas de sus más brillantes composiciones hasta la fecha en el que seguramente es su disco más completo, elaborado, espiritual y a la vez llenapistas. Por supuesto, pop y soul siguen siendo la piedra angular de sus composiciones, pero también gospel, funk o incluso country & western están cada vez más presentes.